La caries entre los más pequeños sigue muy presente . A pesar de las campañas de educación bucodental y el mejor acceso a productos de higiene dental, es posible que el confinamiento provocado por el coronavirus haya aumentado el consumo de azúcar en diversas formas.
El 18 % de los niños menores de 5 años necesitan ser tratados por caries y sólo dos de cada 10 dientes temporales que deberían tratarse en los consultorios dentales lo son. El cepillado de dientes con pasta fluorada al menos dos veces al día a partir de los dos años por parte de los padres debe ir buscando la autonomía del menor a partir de los 3 años. Momento en que debería tener integrado el hábito del cepillado en su higiene diaria personal. No posponiendo la primera visita al dentista más allás de cumplir los 6 años en ningún caso.
Evitar hábitos nocivos como el chupete a partir del año, succión del pulgar, dejar traumatismos o lesiones vivibles si tratar por el dentista y especialmente abusar de alimentos con alto contenido en azúcar o ácido. Son la clave de una sonrisa y salud radiante de los menores. Es importante recordar que la boca nos aporta salud y calidad de vida también en los niños.